Los gatitos se entregan a partir de los 3 meses, edad que no sólo indica la Asociación Felina como edad de entrega, sino y lo más importante, es que el gatito se encuentra en condiciones de manejarse de forma independiente. Otra ventaja de la entrega a esa edad, es que ya están en condiciones de recibir su primer vacuna.

Desde el nacimiento hasta el día de la entrega, los gatitos permanecen junto a sus madres recibiendo todo el estímulo y enseñanzas que ellas les transmiten. Es un error separarlos antes de tiempo y ¨apurar¨ el destete, ya que es un proceso natural donde los bebés se preparan para su independencia mientras su sistema inmune se fortalece y madura, libres del estrés que les produce una separación anticipada y como lo harían en la naturaleza.

Otro punto importante al pensar en adquirir un gatito, es determinar el objetivo de dicha adquisición. Si la idea es disfrutar de un gatito en un entorno hogareño o si la idea es reproducirlo. No es lo mismo, porque un gatito que será una mascota ya se entrega castrado y no requiere demasiadas consideraciones. En cambio, uno que será reproductor se entrega sin castrar y hay que considerar muchos puntos como registrar el criadero en alguna asociación, tener su par para cuando llegue el momento adecuado, darles un espacio exclusivo donde puedan estar sin dañar nada, maullidos fuertes, marcaje de territorio, entre otros.

Por nuestra trayectoria y trabajo con felinos, tenemos perfil veterinario. Los bebés van recibiendo sus controles a medida que crecen y así podemos observar que su desarrollo sea el adecuado para cada edad. Damos suma importancia al aspecto clínico asumiendo un verdadero compromiso con cada propietario.